4 sept 2010


















Recuerdo de las artesanías de Suchow



Las bordadoras entrecruzan

hilos de seda de dos mil colores.

Paren pececitos de siete colas,

gatos maulas que juguetean con míseros saltamontes,

ríos y colinas,

comunas y brigadas,

un retrato de Lu Shun,

el gigantesco puente sobre el Yantsé.



Meses para la exactitud de la tersura.

Semanas para los matices que alcanza un rostro.

Los días van del anverso al reverso,

atravesados por el ojo de un aguja

por cuyas venas corren

dos mil colores de seda.




LECTURA DEL POEMA